Una visita muy esperada
Fotografía de J. L. del Palacio
"Era una fría mañana de invierno, viajamos desde Madrid, y llegamos tras tres horas y media de viaje, al pequeño pueblo segoviano llamado Coca (...). Temíamos que la espesa niebla que nos acompañó desde Santa María, no nos dejara admirar el magnífico castillo, que en otros tiempos tuvo su gloria, y en el que ahora sus ruinas, son morada de las alimañas del campo..."